El bullying suele tener lugar en el aula y en el patio de la escuela. Este tipo de violencia por lo general afecta a niños y niñas de entre 12 y 15 años, aunque puede extenderse a otras edades. El agresor o acosador molesta a su víctima de distintas maneras, ante el silencio o la complicidad del resto de los compañeros. Es habitual que el conflicto empiece con burlas constantemente y que pueden derivar en golpes o agresiones físicas.
Con las nuevas tecnologías, el bullying se ha extendido al hogar de las víctimas, en lo que se conoce como ciberbullying. Los acosadores se encargan de molestar a través de Internet, con correos electrónicos intimidatorios, la difusión de fotografías retocadas, etc.
Desde mi punto de vista hacer bullying a una persona es repugnante ya que nunca deberías hacer que nadie pase por esas situaciones, ni permitir que se lo hagan a otras personas, no hagas lo que no te gustaría que te hicieran.
Aunque nosotros recibimos charlas preventivas en nuestras aulas, aún queda mucho por hacer, es un problema realmente serio que en otros países se está tratando con mayor eficacia.
Arancha Salvador Rodríguez.